No sirven para pareja

POR JAVIER VASQUEZ. 

• Hombres con mamitis. Ya han salido del closet ante su familia y necesitan el concejo de su madre para cualquier tipo de decisión…incapaz totalmente de elegir por sí solos. Transforman sus relaciones en algo totalmente secundario, dejando a su novio o pareja al descuido y dejando a la mama intervenir en el noviazgo. 
• Los mantenidos. Sal corriendo cuando te topes con uno de estos. Ellos esperan “algún día” tener una fortuna en sus bolsillos, pero como no la poseen en el momento, se hacen llamar víctimas de las circunstancias y te harán pagar siempre la cuenta con excusas como: “Ay, se me olvido la billetera” “Préstame que luego te pago” o la clásica de “Invita tú esta vez que yo te invito la próxima”. Son especialistas para nunca tener que pagar un centavo. Se aprovechan siempre de ti. La mala suerte siempre los acecha, según ellos, y van de hombre en hombre porque nadie los quiere. 
• El inseguro. Este tipo de hombre apenas pueden creer que alguien los quiera, cuando logran tener pareja, a los dos días de la relación ya dicen “Te Amo”. Son capaces de humillarse con tal de ser correspondidos, no les importa ser pisoteados. Se atontan ante el otro y jamás dicen no. 
• Los chantajistas. Su frase favorita es ¿Ya no me amas? Manipuladores de principio a fin, son excelentes sacando provecho de tus errores. Utilizan el miedo, la culpa y la presión como muestra de su “amor”. A estos lo único que les importa es su bienestar. 
• El alma de la fiesta. Estos sí saben para que se hizo el licor. Para ellos las fiestas no son exclusivas de los sábados por la noche, simplemente, es un estilo de vida con el cual se comprometen en serio. Estos hombres son el condimento perfecto de todas las reuniones; nunca pueden faltar y siempre están dispuestos a cancelar los planes (de su pareja) con tal de hacerse presentes. 
• El súper macho. Jamás buscan una pareja para realizar una vida de dos, sino un sirviente de día completo. Son prepotentes por naturaleza, creen que tienen el derecho de controlar la vida y el comportamiento de su pareja. En un principio son encantadores y dulces, pero en el fondo no tienen consideración alguna por las necesidades, ideas y sentimientos de su pareja. Mucho cuidado con este individuo, se tienen que cumplir siempre sus deseos y caprichos o su reacción puede ser violenta.   

¿Alguna vez te has topado con uno de estos tipos?