miércoles, 19 de enero de 2011

Desde cuándo atacan a los gays



POR AUGUSTIO CESAR. Pese al silencio de Jesús sobre el tema, el cristianismo, heredó su aversión hacia la homosexualidad


La homofobia es un rasgo de nuestra cultura que tiene sus orígenes en la nación hebrea.

Nim Frías en el libro Homosexualismo Creador (Pág. 25): Una ley sociológica parece presidir la actitud social hacia el homosexualismo: la escasez o el aumento excesivo de la población. Tolerada y hasta estimulada en las sociedades donde la superoblación pudiera ser peligrosa para la seguridad del Estado, era flagelada allí donde un alto coeficiente de natalidad constituía una imperiosa necesidad social. La nación hebrea se halló en este último caso y de ahí partió sin duda la crueldad refinada con que castigó…

Importa esa actitud del pueblo judío, pues, después de miles de años, la legislación y mas aún, la actitud popular, conserva su estigma de odio e intolerancia. La destrucción de Sodoma y Gomorra – continúa Frías en su libro – por el azufre y el fuego, ha quedado como el símbolo de maldición que se cierne sobre todo amor que no tenga por finalidad la reproducción de la especie…

Israel tuvo horror a la esterilidad y la estimaba como una maldición del cielo. El castigo formulado en el Levítico XXX, 13, formó el texto de todas las naciones civilizadas, hasta que el Código Napoleónico, por considerar el homosexualismo como un crimen religioso, lo apartó del articulado.

En el capitulo V del libro de Frías encontramos algo muy interesante: Si la Biblia mantuvo en el horror al homosexualismo a las naciones de Europa y a las que de ella procedieron, durante muchos miles de años, debemos en cambio a sus paginas la más pura y encantadora narración del amor que puede sentir un hombre por otro, en la amistad de David y Jonatan … El genio de Israel, tan contrario al erotismo homosexual, promovedor de la sabiduría de la vida, por el amor no ha producido dos tipos de lo más atractivos que estos dos guerreros … sobrepasa el embelesamiento sexual para arraigarse en lo más intimo del alma. Por eso, este amor de los camaradas se vuelve una escuela de sacrificio, de sabiduría y de heroísmo.

Pese al silencio de Jesús sobre el tema, el cristianismo, heredero del judaísmo, heredó su aversión hacia la homosexualidad y eso se refleja hoy en países como el nuestro donde en una doble actitud encontramos ataques incluso de la misma gente gay.




EL CRISTIANISMO AL REIVINDICAR A LA MUJER GENERA HOMOFOBIA


• La actitud del cristianismo hacia la homosexualidad no finca tanto en la tradición judeo cristiana sino, tal y como lo señalan los especialistas, a la reclusión de la mujer y su pasividad frente a la vida publica, lo cual se dio mucho en el mundo griego donde empezó a proliferar el cristianismo.

• El contenido más novedoso del Cristianismo fue el sitio excepcional que concedió a la mujer en sociedad, y esta reforma tan radical en las costumbres de la época, cambiaron el centro de gravedad del amor: Del adolescente pasó a la mujer. El clan perdió poder y pasó este a la familia, en el hogar

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